3/5/13

puro, incondicional

"Nunca nadie va a mirarte con tanto amor", me había dicho Mariela, delante de su hijo Yamandú, de seis meses en ese entonces. No recuerdo si yo estaba embarazada. Lo cierto es que le creí fervientemente sin saber de qué se trataba.
Hoy puedo dar fue de aquello que me dijo Mariela.
Nada se compara con lo que siento cuando Miguelina me mira.

2 comentarios:


  1. Doy fé. Somos dos grandulones que agachan la cabeza al no poder soportar un segundo mas esa pequeña mirada. Pero con la mamá pasa algo mas..Solo ellas lo saben

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  2. Si... pero sobre el pecho de quién se queda dormida?
    bpbpaaa bpaaa!!!

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Yo también me suspendo con lo que decís