Aprender a atarme los cordones, sacarle las rueditas a la bici y cruzar sola la calle; eran para mí, 20 años atrás, logros importantísimos. Se trataba de visagras entre una y otra etapa, y una vez que finalizaba una y se pasaba a la siguiente no se podía volver a atrás. Los cordones podían quedar débilmente atados, la bici arrancar zigzagueando y un auto frenar de golpe ante un infantil despiste; pero no se podía volver a atrás.
Hace unas semanas aproveché las tres horas de viaje a Paraná para enseñarle a Gonza a hacer globos con los chicles. Si mal no recuerdo ya habíamos pasado la Caminera de Nogoyá cuando, después de unos cuantos intentos fallidos la frutillosa goma cedió a los encantos de la espiración.
- Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii aguantá, aguantá que yo hago uno y nos sacamos una foto!
Dedico este post a mi hermana Andrea, quien me enseñó a hacer globos con los chicles y mini globitos con los globos de cumpleaños ya reventados.
Al Cari, mi cuñado; a mi hermano Claudio y a mi viejo, que una noche antes de la cena formaron un triángulo en el patio, uno en cada punta, y lograron que no necesitara más las rueditas de la bici.
A mi madre por haber sido capaz de esperar al menos cinco minutos hasta que terminara de atarme los cordones y aceptar que yo no la dejara a que lo solucionara ella en 20 segundos. Es que no se podía volver atrás.
Jaja qué lindo! Y sí, a veces no tenemos paciencia con los peques que nos rodean, y no nos acordamos que nadie nació sabiendo.
ResponderEliminarEs certo: a mi me enseñó a andar en bici mi viejo, pacientemente, antes de irse a laburar todos los días. Hasta que una buena noche, a eso de las 8.30, cuando papi volvía del trabajo, en la esquina se topó con una sorpresa: yo que venía haciendome una goma desde mi casa (a mitad de cuadra), con mi bicicletita rosada sin rueditas...
ResponderEliminarPelones en las rodillas al margen, cuando me acuerde de algo que le haya enseñado a algún menor, vuelvo.. jeje!
saby:
ResponderEliminarte mando un beso enorme, me hiciste emocionar hasta las lágrimas
Tu cuña El cari
...cuanta sensibilidad... siempre lo he dicho.. (no es chivo jaja)...
ResponderEliminarJAJAJA si, Melchiori, chivee nomás! HE DICHO carajo!
ResponderEliminarQue lindo que escribis Sabi. Cada post es una pequeña y bella pieza. Uno sabe cuando entra a tu blog que va a pasar un buen rato. Siempre tocas alguna fibra sensible en tus lectores! Eso si, con ese título vas a decepcionar a más de uno que entre esperando otro tipo de contenido ;-)
ResponderEliminar(Y se escribe bisagra creo)
Besos!