El martes 20 de abril cuando en Argentina y en Uruguay sean las 10 de la mañana, en los Países Bajos, donde serán las 3 de la tarde, se conocerá el fallo que darán 15 jueces a la demanda que presentó el Estado argentino contra el Estado uruguayo por violación al Estatuto del río Uruguay.
¿Quiénes son ellos?
El japonés Hisashi Owada es miembro de la Corte desde 2003 y el año pasado fue elegido presidente en lugar de la británica Rosalyn Higgins. El eslovaco Peter Tomka es el vicepresidente. Debido a este recambio fue que se demoró la sentencia, postergándose para el primer semestre de 2010.
Ellos son, ¿hace falta que señale cuál de los dos es Hisashi?
Los restantes miembros son: Shi Jiu-yong (China), Abdul Koroma (Sierra Leona), Awn Shawkat Al-Khasawneh (Jordania), Thomas Buergenthal (Estados Unidos), Bruno Simma (Alemania), Ronny Abraham (Francia), Kenneth Keith (Nueva Zelanda), Bernardo Sepúlveda (México), Mohamed Bennouna (Marruecos), Leonid Skotnikov (Rusia), Antônio Augusto Cancado Trindade (Brasil), Abdulqawi Yusuf (Somalia) y Christopher John Greenwood (Reino Unido).
Lindo escollo para locutores.
¿Sospecharán estos 15 hombres con caras de inteligentes y nombres casi impronunciables para un latinoamericano las expectativas con las que se esperan las 10 de la mañana del 20 de abril acá, tan lejos?
Hay ansiedad, optimismo en algunos, escepticismo en otros. Esperanza se dice? Dolor, quizás. La áspera sensación de caer en la cuenta y preguntarse cómo se pudo haber llegado a esto. El gran interrogante del día después. Las hipótesis. Las tremendas ganas de volver a ir a Las Cañas y comer un chivito en La Rotonda y juntar cucharitas de río (porque en El Ñandu no se encuentran).
Después, bastante lejos de estas cositas simples, las relaciones entre los Estados, entre los presidentes de turno, en el Mercosur.
¿Hubo o no hubo violación al Tratado del río Uruguay?
¿Cuánto más hay en juego?